jueves, 31 de enero de 2013

Capítulo 4: Nueva York

Hola mis queridos lectores, haber os comunico que ahora que ya he terminado todos y absolutamente todos los examenes y ya me voy a poder dedicar exclusivamente al blog. Subiré poemas y escritos mios que no tienen nada que ver con la historia y bueno eso era :D
                                                                                                MUAKS <3




Querida Luis:

Soy yo Cosette, tu mejor amiga. Como ya sabes de mi ¨fantástica¨
caligrafía seré yo la que exprese con palabras todo lo que las demás quieren que sepas. Te acuerdas de la frase del poema este que decía ¨Tus padres se fueron a no sé dónde  y la casa quedó para nosotros…¨ El problema Luis, es que tú te fuiste con ellos. En el poema hablaban de un regreso, un viaje temporal pero ese no es tu caso. Te marchas  un año, dos, veinte, incluso toda una vida, que es lo más probable.
De nuestros corazones no  te irás, siempre tendrás un hueco en el, aun que sea pequeño siempre habrá lugar para ti. Que puede que haya ciudades, un océano, miles de kilómetros, miles de adversidades, pero qué más da, si la amistad es fuerte, lo puede todo. Se, bueno sabemos que ya te habrás resignado a perdernos con el tiempo, y nosotras también lo hemos asimilado a nuestra manera.  Hablamos de una perdida de una parte de nuestra vida, hablamos de la perdida de una hermana, hablamos de la perdida de algo importante.

Seguramente no te habremos dicho suficientes veces todo lo que te queremos, y si te lo hemos dicho son insuficientes.  Tú nos has enseñado a filosofar, a amar la vida un poquito más a aprender a vivirla. Sabemos que todavía estás buscando ese yo interior y que por más que le buscas no le encuentras, pero no hay prisa, tómatelo con calma, un día conseguirás comprender todo. Luis solo eres una adolescente y comprendes la vida como un adulto, tal vez incluso mejor que ellos. Siempre ves el lado pesimista de las cosas, pero cuando consigues ver las buenas, el lado positivo, ¡oh dios! es genial verte con esa sonrisa en la cara y oirte todas esas cosas bellas y geniales saliendo de tu boca.
Sabemos que has llorado, peleado y comportado como una niña pequeña, que has luchado por lo que creías que era lo mejor. Recordamos cuando te dieron la noticia de tu mudanza, empezaste a despotricar contra tus padres y nosotras te asentíamos y te dábamos la razón pero en el fondo sabíamos que tus padres tenían aunque fuese solo un poquito de razón. Tu siempre quisiste vivir en Nueva York, conocer a la población Americana, sus costumbres, sus vidas. Querías vivir lo que se dice el sueño Americano. ¿Y qué mejor oportunidad que está Luis?
Sabemos que estarás llorando al leer esta carta e hipando como una niña pequeña, intentando contener las lágrimas, los suspiros y el hipo y que esto te provocará un hipo aún mayor. Como ya ves Luis te conocemos demasiado bien para no saber cómo actuarás, te conocemos demasiado bien para olvidarte y dejar de quererte. Aquí creo que es mejor que lo dejemos, nos escribiremos pronto, lo prometemos.

                           |Siempre en tí y tú siempre en nosotras|
 

                Cosette             Isabella            Mery    
                          Alice                   Ally    
                                                                                    Charlotte

P.D: Te queremos.
 

Termino de leer la carta y tengo numerosos surcos en la mejillas producidos por las lágrimas, estoy hipando, suspirando e intentando contener todo esto y meterlo todo de nuevo dentro de mí. Han acertado en todo, sabían que llegado en ese punto de la carta iba a llorar, que iba a hacer todo esto que estoy haciendo ahora mismo.

Doblo cuidadosamente la carta dentro del sobre dorado y me la vuelvo a meter en el bolso.  No ha pasado más de media hora desde que empecé a leerla. Cojo mis cascos, el iPod, y busco mi canción preferida. Me levanta los ánimos cuando más lo necesito. Desbloqueo el iPod y busco la canción de ¨The devil tears¨ (Las lágrimas del diablo)

Me sumerjo en la letra de la canción y me pierdo en el mundo de la música dejando a un lado todos mis pensamientos, sentimientos y todo lo que está relacionado con la realidad.

-Din, dan, duuun- Suena una melodía parecida a la que ponen cuando nos van a informar de algo, pero hago caso omiso, llevo puestos los cascos por lo que seguramente no haya sonado.

Noto como una mano me zarandea el hombro rápidamente, giro la cabeza hacia el lado del zarandeo y es Dustin, mueve los labios pero no le oigo porque estoy escuchando música. Me indica que me quite los cascos con las manos. Pone sus dos manos en las orejas y las arrastra hacía abajo a modo de que me los quite. Al fin me les quito y lo primero que me dice es:

-Luis, ponte de una maldita vez ya el cinturón que hace ya un cuarto de hora que han anunciado que vamos a aterrizar, ah y por cierto deja de suspirar que no me dejas leer en paz.- Lo último lo dice en tono bastante irónico aunque ya no sé, mi hermano estos días a estado un tanto ¿bipolar? Unos días te quiere mucho como otros te trata como si fueses su peor enemiga. De verdad que da gusto tener hermanos así. Aún así le quiero mucho.

Cojo el cinturón y lo meto en la ranura de sujeción.  Vamos a aterrizar, todavía tardaremos  dos incluso cinco minuto en aterrizar así que vuelvo a coger el iPod, me pongo otra vez la música, y me vuelvo a perder en su mundo. Pasados estos minutos, me vuelven a tocar el hombro y ya no hace falta que me digan nada más ya se ahora lo que viene y lo que me espera. Ya he dejado atrás mi gran ciudad, ya no hay vuelta de hoja. Hemos aterrizado.

Me quito el cinturón , me coloco los pantalones, blusa y chaqueta. Cojo el equipaje de mano. Voy bajando las escaleras del avión cuando, me di cuenta de donde estaba. Estoy en el aeropuerto JFK John Fitzgerald Kennedy. Es inmenso, es de los más grandes que hay aquí. Se encarga de los vuelos internacionales y es el que más vuelos tiene. Nos dirigimos a las cintas por las que pasará nuestro equipaje y nos dispondremos a ir a nuestra nueva casa, como ya dije para mí de momento no es un hogar y creo que tardaré bastante en llamárselo , tal vez nunca llegue a llamárselo.

Ahora solo me toca ser valiente, aparentar ser feliz por mis padres, tragarme las lágrimas en silencio y encontrar consuelo en las canciones.

4 comentarios:

  1. uf.....está muy bien, esperando la continuación!!!

    ResponderEliminar
  2. Jo que carta mas bonita! Te conocemos demasiado para olvidarte... oh!!!
    Esperando el 5 cielo!
    http://macherieladyartiste.blogspot.com.es/2013/01/lo-que-aquello-nos-transmite.html

    ResponderEliminar